Super inteligencia, velocidad, maestro de combate, agilidad y otras infinitas aptitudes es lo que el padre de Pantera Negra le cedió a su hijo, que adoptó el mismo nombre de superhéroe para llevar a cabo sus fechorías. Pero además de eso le cedió otro importante legado, una característica que los felinos de los que viene su nombre llevan colgando por detrás como cola, pero que él lleva y enseña con orgullo por delante, un pedazo rabo gigantesco que no hay hembra ni macho que se resista al verlo aparecer grandioso entre sus piernas cuando se la saca imponente.
Tras una intensa lucha en los tejados, el Capitán América Alex Mecum le da caza en una fábrica abandonada, donde enseguida sucumbe a sus encantos, degustando su larga y exquisita polla gorda como si fuera un puto borrachuzo, hasta hacerse rebosar las mejillas como un glotón y descubriendo las bondades de un agujero sin fin, por el que le mete toda la polla abandonándose al placer del agujero negro más apretadito y profundo que jamás haya probado. Empuja con fuerza, para que el badajo que lleva por rabo enorme campanee en un vaivén completo que cuando le viene de vuelta le golpea los huevos con el capullo calentito.
Y cómo irse por la ventana sin probar la gigantesca cola en su trasero. Ahora que nadie le ve y que casi ha hecho un pacto con uno de sus peores enemigos, se pega el gusto de enchufarse el pollón por el culo y pajeárselo montándole de espaldas, subiendo y bajando el pandero con la poderosa fuerza de sus inigualables piernas, arrodillándose para sentir la lefa de pantera regando su cuerpo, salvaje, intacta y resbaladiza.
Si alguien tiene alguna idea de quién se esconde detrás de Pantera Negra, los comentarios están abiertos. Yo tenía mi candidato, pero el hecho de que se deje follar cuando este actor nunca se ha dejado follar por nadie todavía, me ha dado al traste con lo que pensaba.
